Al decorar nuestro hogar, debemos tomar en cuenta una serie de puntos importantes para tener un buen resultado.

Principalmente debemos tener claro el presupuesto con el que contamos. Basándonos en esto podemos definir nuestro alcance.

Antes de comenzar

Analiza el espacio a decorar. Debes familiarizarte con las dimensiones que cuentas. Así que busca tu metro y comienza a tomar las medidas básicas del área de trabajo.

Toma fotos, te serán muy útiles al momento de planear el diseño y en la búsqueda de muebles.

También es muy importante que definas el estilo que deseas. Si tu casa es de concepto abierto (muy comunes hoy en día), trata que todos los espacios se combinen entre sí, de esta manera no creas un carnaval de ideas, que al final no quedará muy acogedor.

Verifica si tienes arreglos por hacer. Por ejemplo, cambio de baquelitas, pisos astillados, paredes con rajaduras. En este caso, si está a tu alcance, contrata a un profesional para que realice esto. Recuerda primero tener referencias de sus trabajos previos y cotizar.

Haz un listado de necesidades. Debes sentirte cómoda en el espacio a decorar, al final serás tú la que estés allí la mayor parte del tiempo.

El mobiliario

Una vez tengas las dimensiones del espacio de trabajo, te recomiendo hacer un bosquejo a mano. Si manejas algún programa de dibujo, mucho mejor.  Yo te haré todo más práctico. Trata de hacer un plano del área a mano. Con una cartulina haces los muebles también a escala, de esta manera puedes jugar con el espacio y encontrar la ubicación correcta.

No cometas el error de copiar un diseño de revista o vitrina de almacén. Puedes usarlo de base, pero no es recomendable replicar algo que ves. Puede que el resultado final no sea el esperado. Influye mucho el espacio que utilizan, estilo y la iluminación.

Al momento de comprar los muebles, no te dejes llevar por las emociones. Debes tener claro si estos van a entrar en el espacio que tienes disponible. Respeta la libre circulación y las entradas de luz natural.

Un mueble perfecto es aquel que no solo nos sirve de objeto decorativo, sino que además es funcional. Así que siéntate y comienza hacer un listado de que cosas necesitas. ¿Tienes poco espacio? Que tal un mueble con almacenaje.

Los colores

Un verdadero dolor de cabeza es elegir el color que deseamos usar. Antes de tomar una decisión debemos revisar los siguientes datos:

• ¿Existen entradas de luz natural?
• ¿Es un espacio oscuro y pequeño?
• ¿Qué actividad se realizará en este lugar?

Lo ideal es utilizar colores basándonos en la actividad que se realizará en este espacio. No es lo mismo usar en las paredes de una habitación de descanso un color rojo a uno crema. Para conocer un poco sobre el significado y usos de colores te recomiendo mi post anterior.

Para los espacios pequeños y con poca luz es recomendable usar tonos neutros, tipo beige, blanco, o rosado pastel. Un error es usar tonos verdes o azules en espacios pequeños, ya que estos absorben la luz. Este tipo de tonos son recomendables para lugares amplios y con ventanales.

También hay mala información con respecto a los tonos oscuros. Sabías que mezclando estos con tonos claros y una buena iluminación, ¿podemos conseguir espacios más grandes?

A continuación, consejos para pintar:

Si lo que buscas es ampliar tu espacio, pintar totalmente de un color claro.

Al contrario, si lo que deseas es compactar, entonces deberás pintar todo el espacio de un tono oscuro.

Para agrandar un espacio, se aconseja pintar la pared de fondo y techo del mismo tono.

Si quieres que tu espacio se vea más corto, pinta la pared de fondo de un tono oscuro.

Si tienes paredes muy altas y buscas una sensación visual de más bajas, usa esta técnica. 

Para lograr una sensación de alargar el espacio, pinta tus paredes laterales y fondo de un tono oscuro. 

Si quieres estrechar el espacio, la técnica a usar es esta.

Cuando tienes techos muy altos, una buena idea es pintarlo en un color oscuro, de esta manera acortas la distancia.

Si tienes una pared que deseas destacar, ya sea con algún cuadro u objeto, sigue esta técnica.

Iluminación

Debemos tomar en cuenta la iluminación del lugar. Podemos tener un color indicado, muebles súper hermosos, pero si fallamos en la luz que recibirá cada área, será por gusto nuestra inversión en decoración.

Para tener una iluminación adecuada, debemos lograr un equilibrio entre el tipo y la cantidad de luz que vamos a utilizar.

Existen dos fuentes de iluminación: natural y artificial.

Iluminación natural

Maravilloso aporte que nos da la naturaleza. Dependiendo mucho el tipo de construcción que tengas, el diseño que el arquitecto realizo y la manera en como organizas tu espacio interior, podemos obtener muchas ventajas de este tipo de iluminación.

Ten en cuenta que todo lo que te rodea de cierta manera sirve para reflectar. Debes aprovechar las entradas de luz (puertas y ventanas). Sigue el listado a continuación, pondré de mayor a menor el grado de reflejo.

1. Paredes laterales a la entrada de luz
2. Cielo raso (techo)
3. Pared frontal a la entrada de luz
4. Piso
5. Pared de la entrada de luz

Siguiendo este orden, lo recomendable es pintar nuestras paredes laterales a la entrada de luz, en tonos claros.

Si lo que deseas es aplicar un tono oscuro en alguna pared de tu espacio, lo recomendable es que uses la misma pared donde tienes la entrada de luz, ya que es la que menos reflejo tendrá.

Para las cortinas, se recomiendan tonos claros, no muy abultadas y preferiblemente en materiales que permitan el paso de luz, como tipo mallas o sedas. Si lo que buscas es bajar la intensidad de luz que recibes, entonces utiliza cortinas oscuras y de materiales gruesos.

Si tienes pisos oscuros, puedes usar una alfombra clara, de esta manera ganas luz por ese lado también.

Cuidado con el abuso de los estampados. Estos tienden a oscurecer el ambiente.

Iluminación artificial

Nuestra mejor amiga en las horas donde no contamos con luz natural, o para esos espacios con poca entrada de luz.

Te recomiendo utilizar el mismo sistema que con los muebles. Raya en un papel donde deseas utilizar lámparas y para qué. Recuerda que no debes recargar mucho un espacio con luces, sino crearas un efecto contrario, causaras dolores de cabeza y no será agradable permanecer mucho tiempo en él.

Si tienes el presupuesto, considera usar un Dimmer, de esta manera podrás crear diferentes ambientes en un mismo espacio.

En las áreas de trabajo o lectura, adicional a la iluminación general, utiliza lámparas. Si es una persona diestra, ubícala al lado izquierdo (para evitar formar sombras).